
08/04/2025 10:02 / Uniradio Informa Sonora / Columnas / Actualizado al 08/04/2025
@chefjuanangel
-3 kilos de masa-
-2 bolsas de chiles-
-2 kilos de pescuezo-
Mientras Aurelia acercaba productos a la mesa, los tachaba de una lista que había escrito rápidamente cuando su abuela enumeraba los ingredientes que necesitarían para elaborar los tamales navideños -Aurelia, ya es hora de que aprendas la receta familiar- dijo su abuela cuando planeaban la cena de Nochebuena -Nos vemos mañana en tu casa Aurelia, llegaré a las 8 de la mañana, "ay" te encargo un cafecito-
Al día siguiente, ya era 24 de diciembre, Aurelia se levantó a las 5:30 de la mañana, trapeó la casa, enjuagó ollas y palanganas, sujetó su larga cabellera mediante una trenza gruesa y cuando estaba acomodando los ingredientes sobre la mesa, su mamá salió corriendo -Aurelia, voy al centro de salud, tu abuela se puso mal- y luego, regresó para dar un recado -Aurelia, dice tu tía que tu abuela dejó un recado camino al hospital:
"Dile a mi nieta que busque debajo del cajón de las servilletas"; Aurelia quedó pasmada, miró fijamente al cajón, caminó hacia él y lo retiró por completo, sacó las servilletas, y cuando lo giró, encontró una hoja de papel color rosa con letras en tinta azul; Aurelia la desprendió de la esquina del cajón, la desdobló y comenzó a leer "Querida Aurelia, si tienes esta carta en tus manos, significa que eres la heredera de mi receta de tamales. A partir de hoy debes hacerlos para toda la familia, a continuación te escribo la receta paso a paso...", Aurelia comenzó a mezclar ingredientes siguiendo las instrucciones y deseando que su abuela estuviera con ella - ¡A ver! ¿Qué sigue en la receta?- a mitad de la hoja había un párrafo subrayado: "...forma una bolita de masa, llena un vaso con agua y échala, cuando flote te darás cuenta que estoy contigo porque es la señal de que la masa está lista para ser un tamal perfecto." Aurelia vio que la bolita de masa flotó sobre el agua y rompió en llanto; armó cada tamal siguiendo las instrucciones, los acomodó en la vaporera, la llevo a la estufa, encendió el fuego y contó los 42 minutos que dictaba el manuscrito.
-¿Quieeeén es?- gritó Aurelia cuando escuchó el rechinido de las bisagras de la puerta principal -¿Quieeeén eees?, ¡ay! ¿abuela, pero qué haces aquí, que no estabas enferma?- la abuela tomó asiento y ordenó amablemente -Aurelia, sírveme un tamal, ya se me pasó el malestar mijita, me trajo tu mamá- Aurelia se giró para servirle un tamal con café negro y cuando volteó, encontró a su mamá deshecha en llanto -Aurelia, tu abuela ya está con Dios- ambas se abrazaron sin creer lo sucedido. Desde entonces, Aurelia prepara los tamales cada Nochebuena, siempre destinan una silla para poner una foto de su abuela, a quien le sirven 3 tamales de carne "con sabor a Cananea", así decía la receta que Aurelia heredó a sus 13 años, desde entonces la prepara cada 24 de diciembre para toda su familia, ahora tiene 63 años y está en búsqueda de la próxima heredera.
El tamal es uno de los grandes protagonistas de las celebraciones mexicanas, es tan famoso que cada 40 segundos se come un tamal en el mundo. Según un estudio de Kantar Worldpanel México, 6 de cada 10 tamales se consumen en el desayuno, 3 en la cena y 1 a la hora de la comida.
Chef Juan Angel Vásquez - Licenciado en Periodismo y chef profesional, creador de contenidos gastronómicos para plataformas digitales y embajador de marcas de alimentos.