Generar el hábito de la lectura en un niño
Por Primavera Fraijo
Los beneficios de la lectura están más que dichos. No solo mejoran tu escritura, también tu vocabulario se desenvuelve más, tu cultura general se amplía y te vuelves una persona más empática. Solo por mencionar algunos ejemplos.
Sin embargo, también es bien sabido lo complejo que es adquirir el hábito y, entre más grande es una persona, más difícil le es hacerse de nuevas prácticas.
Es por eso que se recomienda inculcar el gusto por los libros desde muy temprana edad, aunque esa tarea se ha vuelto titánica conforme pasan los años y las nuevas tecnologías han ido apareciendo como distractores.
¿Cómo acercar a mi hijo a los libros?
A continuación te menciono algunos consejos que te pueden servir para acercar a los menores al mundo de la lectura y que, en lugar de verlo como una obligación, lo vean como una manera más para pasar el tiempo.
1.- Conocer sus gustos
El paso más importante es que conozcas plenamente al pequeño, sus gustos y preferencias, de esta manera, podrás ofrecerle una lectura que combine con sus pensamientos.
En el momento que notes que el libro les disgusta, cambia inmediatamente de lectura. No debes obligarlo o terminará odiando la actividad.
2.- Asesoría
Puedes buscar asesoramiento con expertos, sobre qué libros son los ideales según la edad de tu niño. Así, la lectura podrá ser más oportuna y los mensajes serán más claros para ellos.
Esos consejos te los pueden brindar en las mismas librerías.
3.- Variedad
Para que no lo sientan una imposición, puedes llevarle varias opciones que creas que le pueden gustar y que sea el menor quien decida cuál libro va a leer. Se sentirá en control de la situación y eso lo hará sentir más cómodo.
4.- Juegos
Dependiendo de la etapa de la lectura, se pueden hacer juegos derivados de la lectura.
Por ejemplo, para los más pequeños que son de primera lectura, les puedes leer los libros interpretando cada personaje con voces diferentes; utilizando incluso títeres o muñecos.
A los más grandes puedes pedirles que, al finalizar la lectura, se disfracen del personaje que más les gustó. O que realicen un dibujo de cómo imaginan el lugar donde se desenvuelve la historia.
Cualquier idea es buena, mientras sea divertida.
5.- Rutina
Genera una rutina de lectura, que no sea muy tediosa, pero que no pierda el hilo conductor para que en su mente esté presente esa actividad.
6.- Ejemplo
Los niños son de ejemplos. Lo que ven lo imitan. No puedes decirles que leer es importante y no hacerlo tú también.
Dedícale un tiempo a leer, a lo mejor a la par que el pequeño. Que vea que es algo normal en su entorno.
7.- Comunidades
Búscale un club de lectura en la ciudad. Siempre hay alguno acorde a su edad. Para que pueda convivir con más personas que compartan el gusto por los libros e intercambien recomendaciones.
8.- Guardadito
Llévale siempre un libro guardado. En el bolso o en el carro, siempre tengan uno por si acaso el tráfico se pone pesado, la espera con el dentista se alarga, la cola en el súper o cualquier pretexto idóneo para seguir leyendo.
9.- El hermano mayor
En caso de tener dos hijos o más, encárgale al mayor la tarea de leerle al pequeño un cuento cada tarde o cada noche. Esto lo empoderará, además de que reforzará la unión entre ambos.
Y tú, ¿qué consejo agregarías?
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