
por Redacción WEB
07/04/2025 17:42 / Uniradio Informa Sonora / Fama / Actualizado al 07/04/2025
Este 7 de abril de 2025, el carismático actor neozelandés-australiano, Russell Crowe, celebra su cumpleaños número 61, marcando seis décadas de una carrera que ha dejado una huella indeleble en el cine y la música.
Conocido mundialmente por su emblemático papel de Maximus en Gladiator (2000), que le valió un Oscar al Mejor Actor, Crowe no solo es un ícono de la pantalla grande, sino también una figura fascinante cuya vida personal y profesional está llena de datos curiosos que pocos conocen.
Nacido en Wellington, Nueva Zelanda, en 1964, creció inmerso en el mundo del cine gracias a sus padres, John y Jocelyn, quienes trabajaban como caterers en sets de filmación.
A los seis años de edad, debutó como actor infantil en la serie australiana Spyforce, pronunciando una sola línea frente al actor Jack Thompson, con quien años después compartiría pantalla en The Sum of Us (1994).
Este temprano contacto con las cámaras fue solo el comienzo de una trayectoria que lo llevaría a convertirse en una leyenda.
Uno de los hechos más sorprendentes de su carrera es su etapa como músico antes de ser actor.
En los años 80, bajo el seudónimo "Russ Le Roq", lanzó varios sencillos en Nueva Zelanda, como "I Just Wanna Be Like Marlon Brando" y "Shattered Glass", aunque ninguno logró destacar en las listas.
Más tarde, formó la banda Roman Antix, que evolucionó a 30 Odd Foot of Grunts, con la que lanzó tres álbumes antes de disolverse en 2005.
Su pasión por la música sigue viva: en 2010, colaboró con el cantante canadiense Alan Doyle para formar The Ordinary Fear of God, demostrando que su talento trasciende la actuación.
En el cine, Crowe es recordado no solo por Gladiator, sino también por roles complejos como el matemático John Nash en A Beautiful Mind (2001), por el que recibió otro Oscar nominado, y el boxeador James J. Braddock en Cinderella Man (2005).
Sin embargo, su intensidad en el set no siempre ha sido bien recibida: se dice que, durante el rodaje de Gladiator, su exigencia y temperamento causaron tensiones, aunque también forjaron su reputación como un actor comprometido.
Curiosamente, rechazó el papel de Wolverine en X-Men (2000) porque sintió que era demasiado similar a Maximus, prefiriendo explorar otros géneros y personajes.
En su vida personal, Crowe ha sido igualmente intrigante. Casado con la cantante australiana Danielle Spencer entre 2003 y 2018, tiene dos hijos, Charles y Tennyson.
Su matrimonio coincidió con su cumpleaños 39, celebrando la boda en su propiedad ganadera en Nana Glen, Nueva Zelanda.
También es un apasionado de los deportes, siendo copropietario del equipo de rugby australiano South Sydney Rabbitohs, y durante los incendios forestales de Australia en 2019-2020, recaudó más de 400,000 dólares australianos subastando su sombrero del equipo, demostrando su compromiso con las causas sociales.
Hoy, a sus 61 años, Crowe sigue activo en el cine, trabajando en proyectos como el thriller Kraven the Hunter y la serie Nuremberg en Budapest.
En un mensaje reciente en redes sociales, reveló que planea pasar su cumpleaños revisando guiones y jugando tenis, un reflejo de su humildad y dedicación constante.
Fans y críticos coinciden en que su legado no solo radica en sus premios -dos Globos de Oro, un BAFTA y un lugar en el Paseo de la Fama de Hollywood-, sino en su capacidad para reinventarse, desde gladiador hasta músico, siempre con una intensidad que define su arte.
Russell Crowe no es solo un actor; es un fenómeno cultural que, a los 61, sigue sorprendiendo al mundo con su versatilidad y carisma.