Atacan a balazos a Madres Buscadoras al hallar casa de seguridad en Huatabampo
(EL UNIVERSAL).- Ceci Patricia Flores Armenta, líder del colectivo Madres Buscadoras de Sonora, relató los hechos ocurridos el pasado domingo 11 de junio, en una jornada de búsqueda en la que los acompañó el elemento de la AMIC Octavio Ayala, quien fue asesinado este miércoles.
La activista reveló los hechos ocurridos en un domicilio de la colonia Unión, mismos que no habían querido mencionar por el episodio tan impactante que vivieron.
"No habíamos querido hablar de ello, porque fue algo muy fuerte, pasamos momentos de crisis, de miedo, de terror, de no saber qué es lo que podía pasar, de no saber cómo íbamos a salir de ahí", narró.
Ese día, habían terminado temprano la búsqueda porque debían de viajar casi 350 kilómetros de Huatabampo a Hermosillo.
Antes de regresar a la capital del estado, "yo recibo un llamado anónimo donde me refieren de un lugar donde podíamos encontrar algunas fosas de los que estábamos buscando", recordó.
Luego, "pido el apoyo de las autoridades que nos acompañaban ese día en la búsqueda, les digo que solamente es ir a checar ese lugar y ya retirarnos porque nos teníamos que venir a Hermosillo, ellos acceden como siempre a apoyarnos para ir ese lugar".
Lamentablemente había gente armada cuando llegamos. Los recibieron a balazos, dijo Ceci Flores.
Comentó que ella y otra compañera iban atrás, en la caja de la camioneta porque querían ir checando el terreno, lo que pudieran ver por los alrededores.
"Cuando escucho los balazos, lo único que hago, mi reflejo, fue tirarme al suelo, me brinqué de la camioneta directamente al suelo y a la compañera que estaba conmigo también la tiré al suelo para protegernos de las balas".
En la camioneta de la Comisión de Búsqueda estaban otras integrantes del colectivo.
"Cuando miramos que ya no había balazos, nos subimos a la camioneta que ahora sabemos que era lo más peligroso, que podemos hacer, pero al ver cómo estaban aterradas mis compañeras adentro, pues yo quise estar con ellas para tranquilizarlas un poco.
"De repente empezamos a ver que anda gente corriendo, al ratito empezamos a ver que llegaron más elementos de seguridad".
Rescatan a personas secuestradas
Una persona de seguridad les comentó que en esa casa había personas privadas de la libertad y que estaban con vida.
Mientras la persona que les dio el reporte anónimo les recomendó que entraran a la casa, que ahí hay fosas.
"Pero nosotras no pudimos hacer eso, solamente reportar a las autoridades que estaban en el lugar para que checaran, traíamos la herramienta suficiente".
Aclaró que en este evento sólo participaron las madres buscadoras de Hermosillo, porque estaban a punto de regresar. Las integrantes del grupo de Huatabampo ya se habían retirado.
"Como siempre, yo asumo la responsabilidad como en todos los actos en los que yo hago búsqueda, no vamos a poner en riesgo gente inocente como a las compañeras de Huatabampo que están en pánico pensando que la gente las va a involucrar con ese hallazgo y que les puedan hacer daño como le hicieron Octavio", aseveró.
"Yo también tengo miedo, no soy tan valiente, como para decir yo no tengo miedo, pero mi miedo más grande es no ver a mis hijos por lo cual lucho constantemente por traerlos de vuelta a casa", expresó.
Sospecha que haya sido una trampa
Flores cree que pudo haber sido una trampa para el colectivo. "Esa localización no era lo que nosotros buscábamos porque nosotros no estamos para andar reventando casas de seguridad, no somos autoridad, eso le corresponde a la autoridad".
"Esto pasó por casualidad porque creo que ninguna de las madres que buscamos a nuestros desaparecidos, es nuestro plan andar buscando casas de seguridad para ver si hay gente ahí privada de la libertad y que podamos nosotros auxiliar, porque no tenemos ni armas, nuestra única herramienta es un pico y una pala".
"No era nuestro plan, ni nos dieron a conocer que en el lugar que fuéramos, era una casa de seguridad, a la mejor era una trampa pensando que no traíamos tanta seguridad y pensaban hacernos daño, no sabemos", dudó.
De cualquier manera, considera que este hallazgo que hicieron en esa casa que no era su intención, sucedió porque Dios lo quiso. Esa persona o esas personas que estaban privadas de la libertad tenían que seguir viviendo, no era su tiempo de morir.
"Todavía tenían que seguir luchando en este mundo, entonces yo pienso que Dios fue el que nos puso en ese camino, permitió que llegáramos ahí para que salváramos vidas y devolviéramos paz, porque es lo que buscamos, regresar la paz a casa".
No buscamos justicia ni culpables sólo quieren encontrar a sus hijos
Ceci Patricia no quiere morir sin encontrar a sus hijos. "Quiero seguir luchando por lo cual hemos tenido que llegar, nos hemos visto en la necesidad de llegar a implorar piedad por nuestros desaparecidos, implorar piedad por las madres que buscamos a nuestros desaparecidos, nos hemos visto en la necesidad de hacer esto y vivimos siempre aterrorizadas".
"A pesar de tener yo siempre una seguridad permanente conmigo en el estado de Sonora, igual que del estado de Sinaloa, sigo aterrorizada, pensando en qué momento nos puede pasar algo como le pasó a este compañero -Octavio Ayala-, en qué momento pueden hacernos daño por el hecho de llegar a un lugar".
Lleva 8 años de lucha constante por encontrar a sus hijos. "No los puedo encontrar, pero he encontrado miles que no estaban en mis planes buscar, pero fue el plan de Dios".
"Nosotras no buscamos culpables ni buscamos justicia. Hemos tenido el suficiente valor de pedirle a los cárteles piedad por nuestros desaparecidos, piedad por nosotras madres buscadoras y una tregua de paz para seguir luchando por nuestros hijos".
Además, que vean de las madres una esperanza de que el día que ellos desaparezcan puedan volver a casa porque buenos o malos, culpables o inocentes, tienen derecho de ser buscados, reiteró Ceci Flores.