por El Universal
13/03/2025 17:16 / Uniradio Informa Sonora / Sociedad / Actualizado al 13/03/2025
Con un impacto tanto en la calidad del recurso como en la salud pública, una encuesta realizada por la empresa Rotoplas reveló que el 45% de los mexicanos recurre al almacenamiento de agua en sus hogares.
Según un sondeo llevado a cabo por esta compañía en la región central del país, al menos el 80% de los habitantes ha enfrentado las repercusiones de la escasez hídrica, y el 45% ha elegido guardar el agua en cubetas o tambos sin tapa, lo que propicia la contaminación y el desarrollo de microorganismos nocivos.
La crisis representa un desafío significativo para Rotoplas, dedicada a la venta de tinacos, especialmente porque la Comisión Nacional del Agua (Conagua) informó que la sequía, iniciada en noviembre de 2024, se extenderá hasta mayo de 2025, agravando la falta de agua en diversas regiones.
Por su parte, el Sistema Cutzamala, que suministra agua a la Ciudad de México y el Estado de México, muestra un almacenamiento del 60.8%, inferior al promedio histórico de 72.3%.
"Estos bajos niveles han obligado a aplicar recortes en el suministro, lo que ha generado incertidumbre entre los ciudadanos", señaló la empresa.
Rotoplas también advirtió que "el almacenamiento deficiente del agua no solo representa un problema de disponibilidad, sino que también tiene consecuencias sanitarias".
En este sentido, la Secretaría de Salud reportó un aumento del 22% en enfermedades gastrointestinales durante los primeros meses de 2025 en comunidades con acceso intermitente al agua potable.
Estudios citados por la compañía detectaron coliformes fecales en el 65% del agua guardada en recipientes abiertos, junto con niveles de cloro por debajo de los estándares establecidos.
Asimismo, la firma destacó otros riesgos, como la presencia de contaminantes emergentes —residuos de medicamentos y compuestos industriales— identificados por el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA) en depósitos caseros.
A esto se suma que el uso de cubetas sin tapa ha favorecido la proliferación del mosquito Aedes aegypti, vector del dengue, incrementando la probabilidad de brotes en áreas afectadas por la escasez.
Para enfrentar esta situación, Rotoplas subrayó que "la recomendación principal es el uso de sistemas cerrados como tinacos o cisternas, diseñados para proteger el recurso de agentes externos y mantener su calidad por más tiempo.
Estos sistemas reducen el riesgo de contaminación, evitan la proliferación de microorganismos y garantizan un acceso más seguro al agua potable".
Expertos también enfatizan la necesidad de realizar mantenimiento regular, limpiar y desinfectar los recipientes al menos dos veces al año, emplear tapas herméticas y aplicar tratamientos como cloración o filtración para evitar enfermedades.
"En tanto persista la crisis hídrica, garantizar un almacenamiento seguro será fundamental para minimizar riesgos sanitarios y asegurar el suministro de agua en los hogares de México", concluyó el informe de la compañía.
