¿Tienes un loro? ¡Asegúrate de que sea legal!
En algunos hogares es recurrente tener aves como mascotas. Aunque para la comunidad no resulte algo grave, puede convertirse en un delito ambiental si el pájaro fue adquirido de manera ilegal.
Hace poco tiempo, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) intensificó su vigilancia contra el tráfico de animales silvestres, especialmente de especies como loros, pericos y guacamayas.
Desde el año 2008, la Ley General de Vida Silvestre prohibió estrictamente la captura, venta y posesión de psitácidos, que provengan de dentro del territorio nacional.
Lo que significa que adquirirlos en mercados, redes sociales o a través de vendedores callejeros no es válido, aunque se afirme que el ave está regularizada.
La única manera permitida por ley, para tener un loro o perico en el domicilio, es asegurarse de que este haya sido criado en cautiverio, bajo un programa impartido por Semarnat.
Según el Artículo 420 del Código Penal Federal, mantener, transportar o comercializar especies protegidas, sin la documentación necesaria, conforma un delito ambiental.
Por lo que, se contemplan multas de entre 300 y 3,000 días de salario mínimo, lo que en 2025 podría representar más de 600 mil pesos, dependiendo del caso en el que corresponda.